Aquí tienes 7 recetas fáciles con salmón ahumado que te ayudarán a sacarle partido y a triunfar sin mucho esfuerzo en ocasiones especiales.
El salmón ahumado es un producto muy versátil en la cocina. Es sabroso y saludable, y siempre aporta un toque de distinción a la mesa. Si quieres preparar la versión de salmón marinado casero (gravlax) puedes ver nuestra receta aquí. Los usos que puedes darle al salmón marinado son los mismos que para el salmón ahumado.
Consejos generales para usar el salmón ahumado en la cocina
El salmón ahumado es un ingrediente versátil que añade un toque gourmet a cualquier plato gracias a su sabor ahumado y textura suave. Aquí tienes algunos consejos para aprovechar al máximo su potencial en la cocina.
1. Servir en frío: El salmón ahumado se consume tradicionalmente en frío, por lo que es perfecto para ensaladas y entrantes. Para un aperitivo sencillo, puedes combinar queso crema con salmón ahumado y servirlo en tostadas o blinis. Si deseas algo más sofisticado, enrolla el salmón con una mezcla de queso de cabra, hierbas y limón. También puedes incorporarlo en ensaladas frescas junto con aguacate, pepino y un aliño de mostaza y miel.
2. Incorporarlo a platos calientes: Aunque el salmón ahumado se suele servir en frío, puedes agregarlo a platos calientes con cuidado de no sobrecalentarlo para mantener su textura delicada y para que no aporte demasiada sal. Añádelo al final de la cocción en pastas con salmón ahumado como estos macarrones con salmón ahumado y espárragos, permitiendo que el calor del plato lo caliente suavemente sin cocerlo en exceso. También puedes mezclarlo en revueltos de huevos como en estas tostadas noruegas con salmón ahumado o como topping en pizzas y quiches.
3. Enrollados y wraps: El salmón ahumado es ideal para rollitos y wraps. Puedes envolverlo con tortillas de trigo junto a queso crema, hojas verdes y pepino, o prepararlo en un rollito estilo sushi con arroz y algas nori. Otra opción es utilizarlo para hacer rollitos de calabacín o pepino rellenos con una mezcla de queso fresco y eneldo.
4. Sopas y cremas: Aunque es menos común, puedes utilizar el salmón ahumado en pequeñas cantidades para dar un toque especial a sopas y cremas. Añadir tiras de salmón ahumado al final de la cocción de una crema de espárragos fría o una crema de calabacines con yogur, aportará un sabor ahumado y salado que complementa bien los ingredientes suaves.
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CANAPÉS DE SALMÓN SOBRE BLINIS, una propuesta muy sencilla si compras blinis envasados (los puedes encontrar normalmente en El Corte Inglés). De todas formas te damos la receta de los blinis.
ROLLITOS DE SALMÓN RÁPIDOS, para improvisar un picoteo de fiesta en pocos minutos.
CÓCTEL DE SALMÓN Y AGUACATES. Para cenas especiales es mejor servirlo en copas. Puede ser un entrante de lujo en tu reunión de invitados o tu cena de Navidad. Y se prepara en un momento!!
COGOLLOS DE LECHUGA CON SALMÓN Y QUESO FRESCO. Una ensalada con salmón ahumado lista al minuto para quedar bien, un lujo con ingredientes sencillos. Cuando la pruebes, la cenaras cada semana!!
PINCHOS DE HUEVOS DE CODORNIZ Y SALMON. No te quedará ni uno, estos pinchos se comen solos y gustan a todo el mundo. Para completar tu propuesta en la entrada encontrarás más recetas de pinchos.
ROLLITOS DE CALABACÍN CON SALMÓN AHUMADO, una combinación de éxito para tus mesas de invitados.
PATÉ DE SALMÓN CASERO. Se prepara en un momento y ya tienes un aperitivo sencillo y sabroso para todos.
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