Pollo asado al limón

El pollo asado al limón es una de las recetas más clásicas para preparar el pollo al horno. Si usas un pollo de corral tendrás que aumentar un poco las cantidades y los tiempos de cocción.

INGREDIENTES

• 1 pollo entero (mejor si es de corral)
• Un limón para el pollo y otro para decorar
• Sal y pimienta (o 1 pastilla de caldo en cubitos)
• Aceite de oliva virgen extra
• Unas patatitas nuevas bien lavadas
• Laurel, tomillo, orégano, romero… mejor si son frescos
• Una copa de vino blanco (opcional)

ELABORACIÓN del pollo asado al limón

1. Limpiamos muy bien el pollo entero por dentro y dejamos la piel. Lo secamos con papel de cocina y metemos en el interior un limón entero con algunos cortes en la piel.Lo salpimentamos en el interior. Hay quien prefiere poner un cubito de caldo, a tu gusto. Ponemos también algunas hierbas a tu gusto, una rama de tomillo, una hoja de laurel… Una vez hecho esto atamos los muslos por los huesos con un hijo de cocina o gomas de silicona de cocina. Así el pollo mantendrá la forma y el relleno dejará todos los aromas en el pollo.
2. Ponemos en una bandeja de horno. Regamos con un hilo de aceite de oliva (no pongas mucho porque el pollo ya suelta mucha grasa). Ponemos a 180º. Yo prefiero no precalentar el horno antes y así el pollo va cogiendo calor progresivamente.
3. Después de una media hora pinchamos con un palillo la piel de la pechuga, regamos con el vino y tapamos con papel aluminio si vemos que ha dorado demasiado. Ponemos unas patatas enteras bien lavadas en la bandeja y seguimos horneando. Pasados 15 min volvemos a regar bien con el líquido de la bandeja y seguimos el proceso.
4. Lo normal es que el pollo esté bien asado en una hora pero dependerá del tamaño, y puedes necesitar hasta una hora y media. Lo puedes comprobar pinchando con un palillo en la pechuga y cuando no ofrece resistencia es que ya está hecho. Este pollo asado al limón se sirve al momento.

CONSEJOS Y COMENTARIOS del pollo asado al limón

Bajo el pollo en el horno puedes poner una cama de patatas ya cortadas en rodajas pero yo prefiero ponerlas enteras porque recogen menos grasa de la bandeja de horneado.

Si tienes una cazuela o bandeja de horno con tapa en la que entre el pollo es mejor usarla. Al estar tapado el pollo no pierde su jugosidad y además no se quema en exceso por la superficie.

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