Esta quiche de queso y cebolla es un clásico de la cocina francesa. Como puedes ver en la receta se prepara en pocos minutos y puedes servir tanto en caliente como templado o frío.

1 lámina de masa quebrada o pasta brisa (puede ser congelada o refrigerada, pero te animo a hacerla en casa, es muy fácil y puedes ver la receta AQUÍ)
1 cebolla grande o 2 medianas
2 cucharadas de mantequilla (unos 50 g)
250 g de queso fresco
Tomatitos cereza
Unas hojas de albahaca fresca o menta
3 huevos
200 ml de nata líquida
Sal y pimienta

ELABORACIÓN del quiche de queso y cebolla

Para comenzar esta quiche de queso y cebolla, precalentamos el horno a 190º con calor arriba y abajo.
Engrasamos un molde de horno más bien plano con mantequilla. En la foto es un molde redondo de unos 22 com de diámetro. Extendemos la masa quebrada sobre el molde y la pinchamos por la superficie con un tenedor para que no coja aire y se suba.Yo suelo meter unos 5 minutos al horno caliente para que la masa se seque un poco y se empiece a cocer. Como la quiche lleva poco horneado a veces se queda un poco ‘cruda’ y con este paso lo evitamos.
Rehogamos la cebolla cortada en toras finas en la mantequilla y ponemos sal para que suelte el agua y enternezca bien. Cuando esté bien pochada añadimos el queso en taquitos y retiramos del fuego. Mezclamos bien y ponemos sobre la masa quebrada en el molde.
Batimos los huevos con la nata y salpimentamos bien. Vertemos sobre la cebolla repartiendo por igual.
Partimos unos tomatitos por la mitad y ponemos las mitades boca arriba sobre la quiche. Ponemos las hijas de albahaca picaditas.
Horneamos la quiche de queso y cebolla a 190º unos 15 minutos hasta que la quiche esté cuajada y servimos.