Esta receta de tarta salada de Brócoli y Queso se prepara con una masa sencilla y casera que envuelve a una de las verduras más sabrosas y saludables del mercado.

Hemos preparado la tarta salada de brócoli y queso como una crostata italiana. La crostata es un postre tradicional italiano que se prepara con una base de masa quebrada y un relleno dulce.

La crostata salada es una variante de la crostata dulce y se prepara con una base de masa quebrada y un relleno de verduras. Las verduras más comunes para el relleno son los tomates, los pimientos, las berenjenas, las alcachofas, el brócoli y los champiñones. El relleno se prepara generalmente salteando las verduras con ajo y aceite de oliva y añadiendo queso ricotta o queso parmesano.

INGREDIENTES para una tarta salada de brócoli y queso en molde de 25 cm (8 raciones)

Para la masa

60 ml de aceite
60 ml de leche
1 huevo
250 g de harina
5 g de levadura
2 g de sal

Para el relleno

500 g de brócoli cocido
100 g de taquitos de pavo
150 g de mozzarella rallada
2 cucharadas de parmesano
3 huevos
100 ml de leche
Sal y pimienta

ELABORACIÓN de la tarta salada de Brócoli y Queso

En un bol batimos la leche, el aceite y el huevo. Añadimos la harina con la levadura y la sal y mezclamos bien. No es necesario amasar, sólo integrar bien la harina hasta formar una bola. Envolvemos en film y dejamos reposar.
Hervimos los arbolitos de brócoli cortados menudos, como para un bocado, en muy poquita agua con sal. Los escurrimos bien. Deben quedar al dente. También los puedes cocer al vapor, como prefieras. Aquí puedes ver nuestros consejos para obtener siempre un brócoli verde y brillante.
Para el relleno, salteamos los taquitos de pavo con un poco de aceite y después agregamos el brócoli cocido y saltemos unos minutos. Salpimentamos al gusto.
Apartamos en un bol y añadimos los dos quesos, mezclando bien.
Estiramos la masa con un rodillo y forramos el molde dejando que sobresalga masa por los bordes.
Añadimos el relleno de brócoli y queso. Batimos los huevos con la leche y vertemos sobre el relleno.
Doblamos el exceso de masa de los bordes hacia dentro, haciendo algunos pliegues de forma rústica.
Llevamos al horno a 200 °C, con calor arriba y abajo y en la parte media del horno, durante unos 30 minutos. Servimos nuestra tarta salada de brócoli y queso caliente para apreciar el efecto del queso fundido en su interior.