Con esta receta de Corona de Chocolate blanco y negro tienes el éxito asegurado. No lleva horno ni cocción, y podrás lucirte en cualquier celebración con la seguridad de que siempre sale bien.

ELABORACIÓN de la corona de chocolate blanco y negro

Primero haremos la mezcla de chocolate negro. Ponemos a hidratar 6 hojas de gelatina en agua muy fría (10 minutos).
Derretimos el chocolate en el microondas, en intervalos de 40 segundos, hasta que se funda por completo. Aquí puedes ver nuestros consejos para fundir el chocolate.
En un cazo, ponemos la leche, la nata y el azúcar. Añadimos el chocolate derretido y calentamos al fuego sin que llegue a hervir.
Agregamos las hojas de gelatina que ya estarán hidratadas, muy bien escurridas para quitar el exceso de agua. Removemos bien para que se disuelva.
Pasamos la mezcla a un molde y llevamos a la nevera unas dos horas, hasta que cuaje bien.
Para preparar la mezcla de chocolate blanco, debemos seguir el mismo procedimiento anterior, sustituyendo el licor por la esencia de vainilla.
Cuando haya cuajado un poco la capa de chocolate negro, añadimos encima la de chocolate blanco, vertiendo la mezcla sobre una cucharada del revés, para evitar que se rompa la capa inferior. Tiene que tener la suficiente firmeza como para no deformarse al añadir la capa superior.
Volvemos a llevar al un par de horas para que cuaje del todo antes de desmoldarla. Podemos sumergir la base del molde en un poco de agua caliente, para ayudar a despegar la corona.