Esta es la receta para preparar croissants salados rellenos en casa con ayuda de una plancha de hojaldre congelado, de forma fácil y sin complicarte en la cocina.

Para 20 croissants tamaño cóctel 0 12 croissants medianos hace falta una plancha de hojaldre congelado y huevo batido para pintar.

ELABORACIÓN de los croissants salados rellenos

Extender la masa sobre una superficie de trabajo y cortamos en tiras de 7-8 cm de largo y luego en triángulos de 7-8 cm de base. Pintamos con huevo batido. Ponemos en la parte ancha del triángulo el relleno y extendemos un poco hacia el pico.
Enrollamos estirando bien la masa y pegando la punta con agua o huevo batido para que no se despegue en el horneado.
Colocamos los croissants sobre papel de hornear en una bandeja o sobre un tapete de silicona humedecido. Así se quedan bien pegados a la superficie y no se extienden por abajo. Pintamos con más huevo y dejamos reposar un par de horas en la nevera cubiertos con un trapo húmedo para que no se sequen. Puedes saltarte este paso pero quedan más esponjosos.
Horneamos a 200º hasta que la superficie esté bien doradita y retiramos. Podemos servir estos croissants salados calientes, lo que es aconsejable si el relleno lleva queso porque estará fundido, o esperar a que templen y se enfríen.

Aquí tienes diferentes ideas para preparar unos croissants salados rellenos. No te pases con el relleno para que no empalague, consiste en dar un toque de sabor a una pasta, la de hojaldre, ya de por sí jugosa y sabrosa.

De jamón y queso: Un picadillo de jamón York y queso, o una loncha de cada cosa enrollados en espiral (mira la vídeo-receta al comienzo del post)), con un toque de pimienta.
De salchicha o chistorra: Una mini salchicha de cóctel, un trocito de frankfurt o un trocito de chistorra (como de 4 cm).
Roquefort: Un poco de queso roquefort o cualquier otro que nos guste.
Espinacas: Espinacas picadas y rehogadas con bacon y queso rallado, o con pasas, piñones, nueces… Con un toque de pimienta y nuez moscada.
Chorizo o sobrasada: Un picadillo de chorizo o sobrasada con queso rallado.
Un picadillo de salchichón, de jamón curado o de cualquier embutido que te guste, mortadela, salami…