Esta receta de guacamole casero fácil no es la original mexicana, pero es rápida, sencilla y siempre gusta a todos. Tiene un toque diferente al guacamole que sirven en bares y restaurantes.

A lo mejor no le debemos llamar guacamole, sino ‘dip de aguacate a nuestro estilo’, pero bueno, era por simplificar y que nos entendiera todo el mundo. De todas formas, si quieres ver la receta original del guacamole, puedes verla aquí.

INGREDIENTES para un tazón de guacamole

2 aguacates grandes
Cebollino o cebolleta picada fina
Ajo en polvo
Aceite de oliva
Cilantro picado
Sal
1 tomate pequeño
Unas gotas de tabasco ó pimienta blanca molida
1 cucharadita de mayonesa o de nata líquida
Pimentón
Unas gotas de limón o vinagre

ELABORACIÓN del guacamole casero

Abrimos los aguacates en sentido longitudinal y eliminamos el hueso central. Sacamos la pulpa y la ponemos en un bol.
Trituramos la pulpa de los aguacates con el tenedor, y le vamos añadiendo el cebollino, ajo en polvo, cilantro muy picadito, aceite, unas gotas de vinagre, sal, el tomate pelado (sin semillas, picado fino y bien escurrido), el tabasco y la mayonesa.
Mezclamos bien para que quede cremoso pero con textura, no demasiado molido.
Servimos con “nachos” o pan tostado con ajo.

CONSEJOS Y COMENTARIOS

La leyenda dice que dejando dentro del guacamole los huesos tarda más en ennegrecer. Os damos otra solución: Si lo tenéis que preparar con antelación, lo tapáis bien con una película de plástico, de manera que el plástico este en contacto con la pulpa del aguacate para suprimir todo el aire que sea posible, y lo mantenéis en nevera. También se puede cubrir con aceite.

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