Te contamos cómo hacer filetes empanados perfectos, trucos y consejos para triunfar y conseguir que queden dorados, crujientes y jugosos por dentro.

Tipos de empanado para hacer filetes empanados

Antes de empezar, es conveniente decidir qué tipo de empanado quieres dar al filete. Hay diferentes tipos de empanado que se pueden utilizar para filetes, dependiendo del sabor y la textura que se desee obtener.

Empanado clásico: consiste en pasar el filete por harina, huevo batido y pan rallado, en ese orden. Es una técnica sencilla que da como resultado un empanado crujiente y dorado.
Empanado con panko: el panko es un pan rallado japonés que se caracteriza por tener una textura más gruesa y crujiente que el pan rallado convencional. Para usarlo en el empanado, se sigue el mismo proceso que en el empanado clásico, pero se sustituye el pan rallado por panko.
Empanado con frutos secos: se trituran frutos secos como almendras o kikos (maíz frito) y se mezclan con pan rallado para crear un empanado con un sabor y textura distintivos.
Empanado con especias: se pueden añadir al pan rallado un toque de especias como pimentón, ajo en polvo o hierbas aromáticas para darle un sabor extra al empanado.
Empanado con queso (a la milanesa): se puede añadir queso rallado al pan rallado para darle un sabor a queso al empanado. La proporción debe ser de un tercio de queso sobre el volumen del pan.
Empanado a la francesa. En el empanado a la francesa se sustituye el huevo por mantequilla fundida. El filete se pasa por harina, luego por la mantequilla completamente líquida y, a continuación, lo pasamos por pan rallado.

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ELABORACIÓN de los filetes empanados perfectos

Hacer filetes empanados perfectos puede parecer una tarea sencilla, pero puede requerir cierta técnica y práctica para obtener el éxito. Aquí hay algunos trucos y consejos que pueden ayudarte a hacer filetes empanados perfectos:

Elige el tipo de carne adecuado: Para los filetes empanados, se recomienda usar cortes finos y tiernos de carne de ternera, pollo o cerdo, como solomillo, lomo o pechuga. Estos cortes se cocinan rápidamente, lo que ayuda a evitar que el empanado se queme antes de que la carne esté lista.
Sazona la carne adecuadamente: Asegúrate de sazonar la carne antes de empanarla. Puedes usar una mezcla de especias o simplemente sal y pimienta al gusto. También puedes usar una marinada con limón, ajo machaco y perejil y dejar los filetes al menos un par de horas en ella antes de cocinarlos. Esto ayuda a agregar sabor a la carne y asegura que no quede sosa además de aportar jugosidad.
Seca la carne: Antes de empanar la carne, asegúrate de que esté limpia y seca. Si la carne está húmeda, el empanado no se adherirá correctamente. Además, si hay exceso de grasa, puedes recortarla para evitar que el empanado se empape y quede aceitoso.
Prepara el empanado: Pon en un plato la harina, en otro el huevo batido y en otro el pan rallado (solo o mezclado con especias o frutos secos como hemos comentado anteriormente). Asegúrate de que el empanado tenga una consistencia uniforme y que esté seco antes de usarlo.
Empana la carne: Para empanar la carne, primero pasa cada filete por harina, asegurándote de que esté completamente cubierto. Luego, sumerge cada filete en el huevo batido y asegúrate de que esté completamente cubierto. Finalmente, cubre cada filete con el pan rallado, asegurándote de que esté uniformemente cubierto por todas partes. Presiona con las manos para que se adhiera bien.
Fríe la carne correctamente: Para freír los filetes empanados, calienta aceite en una sartén grande a fuego medio-alto. Asegúrate de que haya suficiente aceite para cubrir la mitad de los filetes cuando los coloques en la sartén. No sobrecargues la sartén, ya que esto puede hacer que la temperatura del aceite baje y los filetes empanados no se doren correctamente.
Controla la temperatura del aceite: La temperatura del aceite es importante para obtener filetes empanados perfectos. Si el aceite está demasiado caliente, el empanado se quemará antes de que la carne esté lista. Si el aceite no está lo suficientemente caliente, no se dorará adecuadamente.