Hay muchas variedades de esta receta de patatas con chocos (o ‘papas con chocos’) por toda la geografía andaluza. Te dejo aquí las que más suelo preparar en casa.
A LA MARINERA: Para 4-5 personas:
- 1 kg de choco limpio y en tiras
- 4 patatas grandes
- 1 cebolla
- 2 tomates
- Dos pimientos verdes
- 2 ó 3 dientes de ajo
- 1 vasito de vino blanco (se puede suprimir)
- Una cucharadita de pimentón (se puede suprimir)
- 1 hoja de laurel
- Sal y pimienta
- Un puñado de guisantes (pueden ser congelados)
- Aceite de oliva
- Perejil picado
ELABORACIÓN de las patatas con chocos
- Para empezar con este plato de patatas con chocos, preparamos un sofrito con la cebolla, ajos, pimientos y el tomate pelado, todo bien picado. Incorporamos el laurel y los chocos, damos unas vueltas, agregamos el pimentón y ponemos el vino. Dejamos reducir hasta que se evapore. Incorporamos un poco de agua, la pimienta y la sal o pastilla de caldo (con cuidado, porque los chocos son muy salados) y dejamos cocer hasta que se enternezcan.
- Mientras tanto pelamos y cortamos las patatas a trozos irregulares. Cuando el choco está tierno añadimos las patatas y guisantes a la cazuela y dejamos hervir hasta que las patatas estén tiernas pero enteras y los guisantes cocidos, añadiendo más agua a media cocción si es necesario para que queden algo caldosas.
- Al final espolvoreamos las patatas con chocos con perejil picado, removemos y dejamos reposar unos minutos antes de servir.
EN AMARILLO: Para 4 personas:
- 1 kg de choco limpio y en tiras
- 1 cebolla
- 3-4 dientes de ajo
- Laurel, pimienta en grano
- Vino blanco
- Limón
- Caldo de pescado
- Patatas
- Perejil
- Opcional: Unas hebras de azafrán. Guisantes.
ELABORACIÓN de las patatas con chocos en amarillo
- Rehogamos en aceite la cebolla y ajos, pimienta y laurel. Ponemos el choco y damos unas vueltas.
- Añadimos el vino y, cuando se evapore el alcohol, el caldo de pescado (podemos hacerlo con pastilla). Cuando los chocos estén tiernos les agregamos las patatas y agua si es necesario. Probamos de sal.
- A media cocción de las patatas ponemos perejil picado, y podemos desleír unas hebras de azafrán trituradas en el mortero con algo de la salsa y verterla en el guiso, o colorante alimentario. También podemos poner a media cocción un puñado de guisantes y el zumo de un limón, si nos gusta.
Las patatas con chocos en amarillo de la abuela María: Una variante de esta receta es hacer el refrito, retirar la cebolla, ajos y pimienta, y en ese aceite rehogar los chocos. El refrito lo pasamos por la batidora con el zumo de un limón, colorante alimentario, unos granos de pimienta, perejil picado y un vaso de agua, y lo añadimos a los chocos rehogados en la cazuela. Salpimentamos, añadimos el agua necesaria y las patatas y continuamos el guiso. Probamos de sal antes de servir. Este guiso de patatas con choco es tradicional de la provincia de Huelva y no lleva vino.
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