Esta receta de rosquillas de yema (rosquillas de Alcalá) es la tradicional que se prepara de siempre en Alcalá de Henares y toda la comunidad de Madrid, y con esta receta quedan perfectas.

INGREDIENTES para unas 20 rosquillas (depende del tamaño)

2 planchas de hojaldre

Para el glaseado de yemas

6 yemas de huevo
150 ml de agua
240 g azúcar
200 g azúcar glas

ELABORACIÓN de las rosquillas de yema o rosquillas de Alcalá

Para las rosquillas

Para hacer las rosquillas de yema, lo primero es precalentar el horno a 200 ºC.
Se extienden las planchas de hojaldre y se superpone una sobre otra presionando un poco para que sellen bien. Si quieres puedes espolvorear un poco de azúcar entre las dos planchas.
Se cortan las rosquillas con un cortapastas y se van poniendo en una bandeja de horno algo separadas. Un truco: Se salpican con agua para que crezcan más. Puedes usar un pulverizador de las plantas de jardín, o uno de cocina, los que venden para pulverizar aceite o vinagre.
Horneamos unos 10-12 min a 200 ºC hasta que suban y doren.

Para el glaseado de yemas

Mientras se van templando las rosquillas hervimos 100 ml de agua y 240 gr de azúcar en una cacerola unos 5 minutos para hacer un almíbar. Apartamos del fuego y dejamos que se temple unos minutos.
Batimos las yemas y vamos añadiendo el almíbar sin dejar de remover con una varilla para que no se cuajen.
Llevamos la mezcla de nuevo al fuego para que espese sin dejar de remover unos minutos. No debe llegar a hervir pero tiene que espesar. Apartamos y dejamos que se temple 5 minutos. Cogemos las rosquillas por la base y las vamos bañando en la crema de yemas. Las dejamos enfriar.
Hasta que no estén frías las rosquillas de yema no podemos darle el toque final con el glaseado de azúcar. Sin el glaseado de azúcar están también muy buenas, por si no quieres complicarte ni aumentar más calorías.

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Para el glaseado de azúcar

Mezclamos 50 ml de agua con los 200 g de azúcar glas y batimos bien con una varilla. Sumergimos las rosquillas por el lado de la yema y dejamos escurrir durante unos minutos para que se solidifique.

CONSEJOS Y COMENTARIOS

Los restos de hojaldre que quedan después de hacer las rosquillas de yema puedes amasarlos un poco todos juntos y formar unos palitos que se fríen en aceite y se espolvorean con azúcar glas.