Esta tortilla de calabacín y patata la podemos servir caliente con salsa de tomate frito o fría con una salsa mayonesa.
INGREDIENTES de la tortilla de calabacín y patata para 4 personas
- 2 patatas grandes
- 2 calabacines pequeños ó 1 mediano
- 1 cebolla pequeña
- Aceite de oliva
- Sal y pimienta
- 6 huevos
- 2 cucharadas de queso rallado
Cómo hacer la tortilla de calabacín y patata
- Ponemos en una sartén honda un buen chorro de aceite de oliva y rehogamos en el la cebolla con la patata troceadas.
- A los pocos minutos incorporamos los calabacines. Salamos y dejamos que se haga todo removiendo a menudo y sin tapar la sartén para que los líquidos se vayan evaporando. Cuando todo esté tierno escurrimos el aceite y cualquier líquido que haya en la sartén porque la mezcla debe quedar completamente seca para que no se nos agüe la tortilla. Añadimos el queso rallado y mezclamos bien para que con el calor empiece a derretirse.
- Mezclamos con los huevos. Cuajamos la tortilla hasta que esté dorada por ambas caras. Ten cuidado de que no se queme porque el queso hace que se dore en exceso, controla la cocción a fuego medio-suave.
- Si prefieres una textura más crujiente y compacta en esta tortilla de calabacín y patata, puedes freír aparte las patatas en aceite de oliva, escurrirlas bien y mezclar cuando los calabacines estén salteados con la cebolla. Después seguimos la receta.
Trucos y alternativas para hacer la tortilla de calabacín y patata
- Esta tortilla de calabacín y patata la podemos gratinar al horno con queso rallado o incluir el queso entre sus ingredientes. Bate un para de cucharadas soperas de queso rallado en polvo especial para pasta con el huevo y sigue la receta como te hemos indicado.
- Para darle un toque especial a tu tortilla de patatas con calabacín y cebolla, puedes añadir jamón serrano en taquitos o bacon crujiente para un toque salado y ahumado que combina muy bien con las verduras.
- Otra opción es incorporar hierbas frescas como perejil, cebollino o albahaca, que añaden un aroma fresco y realzan el sabor. Si prefieres un toque más intenso, prueba con una pizca de romero o tomillo seco.
- Para darle un toque más mediterráneo, puedes añadir pimientos rojos o verdes en tiras, que aportan color y un sabor dulce y suave. También puedes experimentar con champiñones o setas salteadas con el calabacín y la patata, que aportan un toque terroso y una textura diferente.
- Si buscas una tortilla aún más ligera, sustituye parte de las patatas por berenjena o añade espinacas frescas (las espinacas se añades al final para que se mezclen sin sobrecocerse).
- Un toque de ajo aromático: Saltea un diente de ajo en rodajas finas junto con la cebolla. Este pequeño cambio aporta un aroma delicioso y un sabor profundo sin sobrecargar la tortilla.
- Versión al horno: Si prefieres evitar la fritura, mezcla todos los ingredientes en un molde y cocina la tortilla en el horno a 180 °C durante unos 20-25 minutos. Esto crea una tortilla de calabacín y patata ligera y esponjosa, semejante a una quiche, sin tener que voltear en la sartén.
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